Venimos de muchas generaciones de cultivar nuestras milpas tradicionales en el sur global como campesinos/as. La milpa ha alimentado y proporcionado nutrición a nuestras comunidades durante milenios. En los últimos 10 años, hemos sembrado y cuidado 6 jardines comunitarios en el Valle de Pajaro (Watsonville y Pajaro).
Como comunidad migrante y campesina nos encontramos en medio de uno de los valles más productivos para la agroindustria extractiva, en la Costa Central de California, rodeados de monocultivos de berries frecuentemente exportados a 5 continentes.
Durante los últimos tres años nos hemos organizado a través de nuestra forma comunitaria la asamblea, nuestra forma central de toma de decisiones: un espacio de creación e intercambio de conocimiento que representa la comunidad que emerge de nuestras parcelas de milpas para lograr la soberanía alimentaria.